Reseña: Historias de miedo para contar en la oscuridad



Nuevamente Del Toro entra detrás de producción para la adaptación de una serie de relatos folclor de la cultura anglosajona. André Ovredal es quien estaba a cargo de la dirección y por fin vimos la cinta.  Algunos comentarios apunta a señalar, o acusar la película de ser muy infantil o juvenil,  y esto por la cuestión de que los protagonistas son adolescentes y que no consigue su mérito de aterrorizar a un público adulto. 
   Hay que entender una cuestión y es el contexto de la trama, "Historias de miedo para contar en la oscuridad" es una adaptación de una serie de relatos compiladas por el escritor Alvin Schwartz a principio de la década de los 80's. El director reúne los relatos más macabros para la película. En cuestión de la acusación de la cinta de ser "infantil", pues qué creen, es que resulta que originalmente estos relatos están dirigidos para un público infantil. En cambio la adaptación fue más para una población juvenil. 
   Entonces tenemos aquí a un grupo de jóvenes que, durante la noche de halloween en 1969 en Mill Valley, tras escapar de los típicos bravucones se ocultan en una enorme mansión. Anteriormente fue hogar de la familia Bellows, una acaudalada familia que tenía recluida a Sara, la hija con problemas mentales que se dedicaba a escribir historias de miedo. Cuando el grupo de amigos encuentra el libro de Sara Bellows descubren como éste tiene vida propia y escribe sus historias siendo ellos los protagonistas. Cada uno enfrentará un relato oscuro del que tratarán de sobrevivir.
   Había mencionado que está basado en libros que son tres en total, de los cuales eligieron los que han pasado de generación en generación en la cultura anglosajona, tal como el "Dedo gordo del pie" o el "Atame caminante" entre otros. 
   Lo bueno: Es cierto, la película es de un aire juvenil con una trama demasiado fantástica, pero tiene cosas rescatables como el diseño de los monstruos al puro estilo de la vieja escuela: látex. Por supuesto aquí tuvo que ver el señor Del Toro para dar la impresión de realismo y no que todo el tiempo sea computarizado, entre ellos "la mujer pálida" del sueño rojo. Se trata de la figura de lo que parece ser una mujer obesa. De primera instancia su gesto luce como un personaje cariñoso o hasta tierno, y lo aterrador es no saber cuáles son sus verdaderas intenciones y de lo que es capaz de hacer. La escena del cuarto rojo con la mujer pálida tiende a ser tensa. 
   Lo malo: tiende a ser algo predecible, y sobre la cuestión de que es infantil es algo que ya había abordado pero explicando el contexto de la historia. El único monstruo que no me convence es Harold, el espantapájaros. Luce algo pueril, pero en cuanto me enteré de los libros de Alvin Schwartz resulta que el diseño de Harold es el mismo que el de las ilustraciones, (aunque creo que se pudo haber mejorado el aspecto). 
   Calificación: 7/10

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