Desde Ciudad Guadalajara, aparece un autor que ha tenido una larga trayectoria en el camino literario del Horror, Fantasía y Ciencia Ficción: J.A. Lozano.
Rebeca y los Cantos Demoníacos se trata de su obra publicada en el 2014 por la editorial Edhalca. Lozano nos sorprendió con el personaje de Mériac en el tema del vampirismo, y ahora nos trae a otro personaje femenino pero ahora en el mundo de los demonios. A diferencia de Mériac que es un tipo de anti héroe, Rebeca es todo lo contrario, es una villana que no se tienta el corazón -es más ni tiene- al momento de tener que destruir a sus víctimas, garantizando una fiesta de gore y tortura inhumanas al más estilo de Clive Barker.
El libro se compone en tres partes, la primera se trata de versos que en realidad son cánticos demoníacos, en donde se nos explica la naturaleza de los demonios, aquellos seres que habitan en el inframundo, y la causa de su odio hacia la humanidad. Al igual que los demonios, Lozano exhibe la tendencia a la corrupción del hombre y el recurrir a los demonios para ser socorrido, dejando ver que los demonios no son la causa de la pérdida humana, sino que éstos atribuyen su propia destructividad a ellos, y los demonios sólo contribuyen en acelerar su sufrimiento.
La segunda parte son relatos donde se narra la relación del humano con los demonios: los pactos diabólicos y la consecuencia del pago, tal cómo lo predijo Úrsula, la antagonista de la Sirenita de Disney: "Si quieres ser feliz, entonces tiene que pagar". Con descripciones que hacen ver al lector que no es necesario morir para ver el infierno.
Mientras que la tercera parte se trata de la novela que hace mérito el título, se trata de una novela corta que se centra en una serie de asesinatos ritual que se desatan en la ciudad de Guadalajara. Dos agentes de la justicia, Ulises y César, se hacen cargo del caso, y al momento de tener que descubrir al responsable descubrirán, demasiado tarde, que han abierto la puerta al mismo infierno sobre la ciudad. Los asesinatos son sólo el inicio de un holocausto demoníaco.
El autor nos brinda descripciones explícitas, donde los más afortunados son los que mueren más rápido, con sólo decir que hay a una víctima fémina a la que le extraen el útero estando viva, mientras a otra la desollaron estando consciente.
La narrativa nos conduce a escenarios comunes de la ciudad de Guadalajara, que nadie se imaginaría serían el escenario perfecto para la diabólica trama.
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