Cuando supe que Rob Zombie filmó la tercera parte de la saga de los más infames psicópatas, el clan Firefly, me costaba trabajo asimilar ya que la segunda "Los Renegados del Diablo"fue una de sus obras fílmicas más chingonas, superando La Casa de los 1000 cuerpos. Al saber que esta secuela era continuación directa de la antecesora, me preguntaba cómo diantres sobrevivieron los Firefly después de la balacera.
Tanta curiosidad y la cinta se proyectó en una limitado número de cines, esto por su excesivo contenido de consumo de drogas, asesinato, violencia y sexo explícito y al fin se me hizo poder verla. Y honestamente es una mierda. Digo, tanto para terminar y decir "¡esto fue una basura!".
Hay que reconocer que desde hace diez años, las últimas producciones fílmicas del cantante Rob Zombie no son malas, son terribles, desde la secuela del remake de Halloween y 31. La tercera parte que viene a cerrar la historia de los asesinos Firefly fue un desastre. Así que agarrense porque habrá algunos spoilers.
El trío logra sobrevivir al tiroteo de las autoridades, pero se encuentran detenidos y cada uno son sentenciados a pena de muerte. Capitán Spaulding es condenado a ejecutado, Ottis debe cumplir cadena perpetua y Baby está en la prisión para mujeres, pero debe soportar vejaciones y lidiar con criminales que quieren verla muerta. Diez años después, un nuevo aliado llamado Foxxy ayudará a la fuga de los asesinos más peligrosos a escapar, dejando una estela de muerte a su paso.
Desde el momento en que descubres cómo logran sobrevivir (en serio, ¿cómo logra un sujeto vivir después de recibir 20 tiros?) vas a exclamar con un "No Mames".
Por cuestiones de salud el personaje protagonizado por Sid Haig fue sustituido por el actor Richard Blake, actor que ya había aparecido en 31. Pero la introducción de este personaje fue completamente improvisada, salen con que es medio hermano de Ottis, el problema de esto es que alteran la historia cuando introducen así a un personaje, ahora resulta que es medio hermano y nunca lo mencionan en las antecesoras.
Se nota el cambio de los personajes, Ottis es menos sádico y es quien representa la parte racional del grupo cuando era uno de los más desatados; en cambio Baby pierde la cordura y se vuelve un personaje vago e incoherente. Los asesinatos son menos creativos a comparación de los anteriores, demasiado flojos, y parece que la trama no va para ningún lado, digo ok escaparon de prisión y...¿qué sigue? Como todo prófugo deben huir de la Ley, pero ¿cuál es el siguiente plan cuando cumplen su cometido? Pues nada, llegan al hartazgo y aburrimiento. Y nada mejor que ir a México donde nadie los reconozca, y qué mejor que usar un cliché. Y oh sorpresa, cuando arriban a México están celebrando, qué creen, Día de Muertos. Pareciera que en las películas gabachas se celebra Día de Muertos cada vez que aparece México. Y para terminarla de chingar, festejan en pleno mes de abril una festividad que es en noviembre. Desconozco si Rob Zombie se informó pero es una gran cagada de error.
Si creen haberlo visto todo, el gran conflicto es cuando los Firefly se ven asediados por el líder de una banda de narcotráficantes llamados los Satán Negro, y ahhh usan máscaras de luchadores. ¿Es en serio, Zombie? ¿Te fuiste por lo más obvio?
El final fue de los más... mierda, no sé qué expresión usar pero solo me viene a la mente que es una gran basura.
Personajes que curan fácilmente y sin cicatriz, clichés, Día de muertos que no se celebra en un día adecuado, asesinatos flojos, improvisaciones, no, no, una chingonería para que te aburras. Definitivamente Zombie debería mejorar en sus películas.
Calificación: 0, y estoy siendo amable
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